lunes, 13 de mayo de 2024

021 - Puerto Rico

 EL JUEGO


Sí, Puerto Rico es sin lugar a dudas uno de los mejores juegos de mesa, y además un clásico que no puede faltar en cualquier ludoteca que se precie, un juego sin azar, sin elementos ajenos que puedan perjudicar las estrategias de los jugadores. Aún así, cuando un novato se acerca al Puerto Rico, que no huya, que el juego es, quizás, uno de los mejores para aprender por su sencillez y su mecánica. En un par de turno se aprende la mecánica, después todo depende del jugador en cuestión. Es un juego fácil, divertido, emocionante y una estupenda oportunidad para descubrir juegos más densos y comnplicados.  Además, se juega en una hora y media aproximadamente, por lo que lo hace ideal para jugar una partida acompañado de otros juegos más light. El juego recrea la colonización de la Isla de Puerto Rico y su consiguiente explotación de sus recursos para crear la Isla más rica de todas. 

COMPONENTES 

Las fichas de cartón representan los edificios y explotaciones que se pueden construir en la isla, mientras que los peones marrones representan los esclavos que trabajan en las explotaciones. Eso si, el juego no brilla por sus componentes, que son sencillos y sin demasiadas pretensiones. La caja muy al estilo europeo, también sencilla y sin llamar mucho la atención. 

LA MECÁNICA DEL JUEGO 

La mecánica del juego, resumida, viene siendo que el jugador del turno elige un rol y hace lo que éste le permite. Posteriormente todos los jugadores, siguiendo el orden del turno, realizan la acción que ese mismo rol le permite. Cuando todos hayan jugado, se pasa la ano de roles al jugador de la izquierda y éste elige otro, y así sucesivamente. El jugo termina cuando se acaban los colonos o los puntos de victoria, y gana el que más puntos de victoria haya conseguido reunir durante la partida.

Los edificios se dividen en dos tipos: edificios que dan algún tipo de beneficio en concreto, y los que sirven para obtener mercancías de las explotaciones. Todos ellos tienen círculos que es donde se sitúan los trabajadores, si algún edificio no tiene el circulo ocupado, no funcionará y por lo tanto no dará el beneficio a su propietario. También hay que tener en cuenta de que para que una explotacion dé la materia o materias que produce, tiene que existir un trabajar en la explotación y otro en el edificio. Si el edificio puede contener más de un trabajar, esto quiere decir que con él puedes cubrir una explotacion o varias.

EL TURNO DE JUEGO 

El turno de juego, tal y como he contado antes, es sencilla. Primero se elije el rol que se va a jugar durante el turno. Este rol lo elige el dueño del turno entre los que aún no se hayan cogido. Recordar que al final de la ronda, todos los roles que no hayan sido elegidos recibirán una moneda que se podrá acumular si al siguiente turno tampoco fueron cogidos. Esto hace que se intenten coger todos los roles antes de que acumulen muchas monedas.
Una vez que el jugador actual ha cogido un rol, todos los jugadores contando con él mismo, deben de realizar la acción descrita en el rol, a excepción de que él, por ser el que ha elegido el rol, tiene un beneficio que no tienen los demás. Por lo que todos los jugadores van realizando las mismas acciones turno tras turno.

Cuando cada jugador ha elegido un rol, comienza una nueva ronda donde el jugador inicial es el siguiente jugador a la izquierda del que actualmente tenía el turno. Volviendo a elegir rol.

COMO GANAR

Gana el jugador que tenga más puntos de victoria al final de la partida. Los puntos de victoria se consiguen de varias formas, la más común es mandando mercancía con los barcos, aunque también se pueden conseguir con edifcios especiales.

RESUMIENDO

Es un juego extenso de explicar y que me ocuparía varias horas el escribir exactamente la mecánica. Creo que se ha quedado un poco embarullado y que no hace justicia al juego, pero es algo complejo de explicar resumiendo lo máximo posible para no aburrir. Pero si algo quiero dejar claro es que es uno de los mejores juegos que existen y que merece la pena darle una oportunidad.

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